Luego de que saliera a la luz que Kevin Federline realizó una entrevista en donde afirma que sus hijos Sean Preston y Jayden James decidieron alejarse durante meses de su mamá debido a las fotos de desnudos que publica en su Instagram oficial, Britney Spears comentó en sus redes sociales que hay más detrás de esta historia. "Me entristece escuchar que mi ex esposo decidió hablar sobre la relación entre mis hijos y yo. Como todos sabemos, criar chicos adolescentes nunca es fácil para nadie. Me preocupa el hecho que de la razón está basada en mi Instagram. Pasó antes de Instagram. Les di todo. Tengo una sola palabra: dolor. Lo diré.. mi madre me dijo: 'Deberías dárselos a su papá'. Lo comparto porque puedo. Tengan un buen día amigos", escribió en sus historias de Instagram. Luego, Britney decidió volver a comentar sobre el tema en su feed de Instagram diciendo: "Para agregar a lo que dije en mi historia, como su madrastra dice: 'cualquier cosa que está pasando fuera de esta casa no tiene que ver con nosotros', me gustaría compartir que la puerta hacia al exterior es una toma de las puertas blancas en las que estuve por 15 años, la tutela recién terminó hace 8 meses" y agregó que "les recuerdo que el trauma y los insultos que vinieron con la fama y este negocio no solo me afectaron a mi, sino también a mis hijos también. Soy humana e intenté hacer lo mejor posible". Britney comentó que hay "otros artistas que han hecho cosas peores cuando sus hijos eran jóvenes" y que "durante mi tutela yo estuve controlada y monitoreada durante 15 años. Necesitaba permiso solo para tomar Tylenol. Debería poder hacer muchas más cosas además de hacer topless en la playa". Finalmente, Britney agregó que "no me sorprende que como mi familia hizo entrevistas, ellos lo hagan también. No me sorprende para nada su comportamiento y su acercamiento sobre lo que tuve que lidiar".
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